Las remasterizaciones que están llegando a PlayStation 4 están conformando un bloque bastante importan dentro de su catálogo. Hasta ahora, pocos juegos que no fueran de PlayStation 3 han sido los elegidos para dar el salto a PlayStation 4, pero el que nos ocupa ahora, ha sido uno de ellos.
The Legend of Kay Anniversary es un título que originalmente se lanzó en 2005 para PlayStation 2, y ahora que se cumplen 10 años desde su lanzamiento, había que practicarle un lifting para relanzarlo de nuevo.
Historia sencilla con recauchutado gráfico
Pero vamos a empezar por el principio. Nosotros encarnaremos a Kay, un gato que pertenece – como es obvio – a la Aldea de los Gatos. La historia nos cuenta cómo las aldeas del resto de especies viven en paz hasta que los Gorilas y las Ratas llegan para aguarles la fiesta. Ahora son ellos los amos de todos los territorios y gatos y demás no pueden vivir en libertad. Aquí es donde entra en escena Kay, un jovencito un poco arrogante, pero valiente y de buen corazón que querrá despachar a tanto a los simios como a los roedores a base de espadazos.
The Legend of Kay es un juego de plataformas y acción bastante sencillo de superar y dirigido a los más pequeños de la casa. Su estética casi animada y trama no son complicadas y se puede disfrutar un buen rato jugando. Los personajes son también son bastante planos, aunque se libran un par de ellos. Kay se servirá de una serie de chistes para plantarles cara a ratas y gorilas que si bien nos hacen soltar una carcajada, no son demasiado buenos.
Nordic Games le ha hecho un lavado de cara al juego mejorando sustancialmente lo visto en PlayStation 2, aunque sin cambiar el estilo. Texturas, iluminación, paisajes, etc., podremos disfrutar de un título actualizado gráficamente, aunque se nos hará pequeño teniendo en cuenta que los títulos más pequeños para PlayStation 3 nos ofrecen mapeados mucho más grandes. Sí es verdad que encontraremos mucha variedad en los paisajes, ya que nos tendremos que mover por diferentes zonas a lo largo de nuestra aventura y es de agradecer que éstas no sean calcas de las anteriores.
Un gato con malas pulgas
Nosotros manejaremos a Kay, un joven gato que se ha autoimpuesto la tarea de expulsar de los diferentes reinos a gorilas y ratas. El sistema de combate en este título no tiene nada de intrincado, aunque sí costará realizar algunos combos si no nos paramos a leer un poco las instrucciones. Espada en mano, podremos atizar a nuestros enemigos, los cuales podrán bloquearnos y será importante tener esto en cuenta, pues sin darnos cuenta pueden hacernos bastante pupa.
Kay podrá, además de dar espadazos, usar magia, la cual supone un ataque mucho más potente, pero nos deja expuestos al ataque de los enemigos mientras la canalizamos. Además de ello podremos portar objetos, una característica que le da un plus variedad al juego pues en nuestro inventario podremos llevar bombas y pociones de todo tipo. Incluso podremos vestir una armadura que nos evite golpes de daño.
Estos objetos no solo nos servirán para el combate. Los mapas están llenos de misiones y puzles que tendremos que superar para continuar con nuestra aventura y, por ejemplo, las bombas nos servirán tanto para derrotar a enemigos como para abrir grutas secretas o tirar abajo torretas desde las que nos lancen proyectiles.
El sistema de combate tiene alguna que otra pega, pero es normal encontrarle algún fallo teniendo en cuenta que en las consolas posteriores los juegos tienen un sistema de lucha muy fluido. Encontraremos que tras realizar algunos combos, Kay se queda parado y en ese lapso de tiempo somos pasto de los enemigos. También es verdad que los enemigos pueden llegar incluso a asustarse tras recibir unos cuantos golpes, por lo que tendremos que aprovechar para dar la estocada final.
Una cámara mejorable
Si hay algo que nos llamará la atención sobremanera desde el minuto cero es la cámara que se gasta este título. Intentar hacerse con el movimiento de la cámara nos resultará la tarea más complicada de todo el título. En las partes en las que no estemos en combate nos será algo más sencillo, ya que no nos tenemos que preocupar de recibir golpes; pero cuando estamos en plena lucha, se nos hará una odisea intentar ver por dónde nos vendrán los golpes, ya que la cámara no estará del todo de nuestro lado.
Para realizar exploración tampoco será de gran ayuda. Cuando tengamos que saltar a plataformas en movimiento o balancearnos para agarrarnos a un saliente, tendremos que tener cuidado, porque al ser tan rígida la cámara, podremos terminar cayendo y volver a tener que empezar.
Conclusiones
The Legend of Kay Anniversary no es la mejor remasterización pero sí que tiene el toque de juego plataformero que tanto se vio allá por la época de PlayStation 2. No puedo negar la nostalgia que he respirado al ponerme a los mandos de este juego, pero no se le pueden pedir peras al olmo.
Con un trabajo de remasterización bastante bueno, hay características que a día de hoy van a chocar mucho tras dos generaciones de juegos. Eso sí, echar un ratillo jugando como Kay le puede venir bien a cualquiera.
