Bethesda ha decidido llevar su franquicia más famosa, Elder Scrolls, al terreno del MMORPG confiando es que su fama entre los jugadores les permita llevarse un pedazo del pastel. Lo tiene difícil, la competencia es dura y está muy bien asentada. Hace un par de semanas distribuyó una beta cerrada entre los miembros de la prensa para que pudieran juzgar con propiedad. Y este mi veredicto.
Primeras impresiones
Nunca he sido muy amante del rol occidental, yo siempre me he decantado más por su hermano japonés, aunque he hecho mis incursiones en este género, por supuesto. De hecho, nunca he jugado ningún juego de la saga Elder Scrolls, a pesar de la enorme fama que tiene. Y esto, lejos de ser un impedimento para mí a la hora de juzgar la beta, añadía un parámetro más a valorar ¿Puede un completo noob desenvolverse bien en este juego? La respuesta no es sencilla.
Para poder jugar me descargué un pequeño programita que se instaló sin mayores problemas, pero que a la hora de arrancar se embarcó en un proceso de actualización que duró varias horas. Mi conexión a internet es de 10 megas, que no es la panacea pero tampoco está mal, así que o la actualización era realmente sustanciosa o los servidores aun no estaban a punto. Una vez que empezabas a jugar los tiempos de carga también se eternizaban, a veces se podía tardar bastante para empezar a jugar. Esperemos que estos sean defectos típicos de una beta y se arreglen en la versión definitiva.
A todo esto hay que sumar que la beta está totalmente en inglés, un inglés de nivel bastante alto por cierto. Esto es lógico en una beta internacional, y si el conocimiento de la lengua de Shakespeare del jugador es bueno no tiene nada malo. Pero si, como es mi caso, nuestro inglés es de supervivencia lo tendremos bastante crudo para entender los menús, los textos de ayuda y las conversaciones con los personajes. La mayor parte del tiempo solo comprenderemos la idea general y nos perderemos muchos detalles y nuestro avance en el juego se puede verse afectado por ello.
El entorno de juego es fluido, apenas se nota lag, pero aún se nota inestable. Los escenarios denotan algunos pequeños defectos de diseño. En dos ocasiones tuve que salir bruscamente de la partida. En una ocasión me quedé atascada en una mesa de trabajo y en otra, la más espectacular, salí de un edificio y caí en un enorme precipicio blanco donde se suponía que debía estar la ciudad. De hecho, al reiniciar la partida tras este incidente mi personaje aún seguía cayendo y cuando el escenario reapareció me estrellé contra el suelo y morí. Estos son fallos típicos de una versión aun sin depurar que te reportan curiosas anécdotas que contar. O al menos eso espero.
Personaje
Se podían elegir entre 9 razas, cada una afiliada a una de las 3 alianzas disponibles. La tipología de las distintas razas está preestablecida para ambos sexos, y luego podremos personalizarlo en una pantalla con innumerables parámetros, algunos importantes, como la talla y el color de los ojos o el peinado, y otro en los que la mayoría ni se fija ni le importa, como la inclinación de los ojos o el grosor de los labios. A pesar de todos estos parámetros los personajes cambian más bien poco y no es raro encontrar clones durante el juego, tanto NPCs como otros jugadores.
También podemos configurar el tipo de habilidad que queramos para el personaje: o bien guerrero puro y duro (Dragonknight), habilidoso en magia (Sorcerer), alguien más sigiloso y sutil, como una especie de ninja (Nightblade) o un guerrero que tenga sus habilidades físicas y mágicas equilibradas (Templar)
